Les cuento:
Localización: Blancanieves y los siete enanitos.
Situación: escena donde la bruja malvada saca de su canasta la grande y apetitosa manzana roja para envenenar a su presa-princesa.
De toda aquella puesta en escena, yo sería la manzana roja.
¿La vieron a esa manzana?
Es GRANDE y roja como ella sola puede ser, con esa piel per-fec-ta al tono per-fec-to y curiosamente llamativa; practicamente, estás suplicando que la bruja mala te la entregue para poder saborearla.
¿Les digo que sintió Blancanieves al morderla?
Asco. Sintió asco.
Porque en los excasos dos segundos que tuvo noción para saborear aquel suculento aperitivo, no le gustó.
¿Por qué?
Porque estaba podrida amigos.
Y así estoy yo ahora.
Puedo parecer o ser o lo que vos quieras que sea de afuera y me conoces y ZAS!
No soy lo que parecía.
Y estoy totalemente decepcionada de mí por saber y asimilar que hoy soy eso... una simple cascara en buenas condiciones.
Me siento igual, aunque mi cascara, a estas alturas tampoco se encuentra en buenas condiciones. No sé qué decirte, son etapas, supongo.
ResponderEliminarSi me das la opción de volverme algún personaje, me hago el Fénix de Dumbledore en Harry Potter, se me da bien "renacer".
Cero novio, mil amigos & un ex que no la deja respirar -¿Acoto quién, o se entiende?. Cinco dedos sobran de una mano si contamos quienes la pueden enamorar. Muchos se mueren por estar con ella, pero ahora tiene una mente muy liberal. Es de la que vá a cualquier lado. Tenerla es soñar.
ResponderEliminarLo leí y me sonó a vos, no sé. Te amo AtacadoraCocoraky.
No creo que seas solo un cáscaron de huevo, con la clara y la yema muerta adentro, y lo sabés.
ResponderEliminarComenté sobre el texto en el segundo comentario, porque el anterior lo hice sin leer el texto, I'm sorry.
Chau, deja garzos.